Por Jefe Koala
Unos lo quieren, otros lo tienen, otros jamás lo han tenido; mientras aquellos que lo tuvieron, lo maldicen.
Todos hemos tenido esa bonita ilusión del amor romántico, de que uno encontrará una persona con la cual todo será bonito, color de rosa, amantes eternos, aquel que jamás nos lastimará y con la que estaremos toda la vida.
Nuestro príncipe azul, o la princesa en apuros.
Podrás amarlo, podrás odiarlo, pero todos hemos deseado una pareja con la cual podamos reír, amar, sentir y dar sin preguntar.
Y la verdad es que no siempre es así. Hubo alguien que tuvo una pareja y al final esa bella historia de cuentos románticos tuvo un final trágico, y jamás quiere saber de historias así.
Hay quien siempre ha tenido parejas como si fuera historia de terror, y desean una historia de cuentos románticos.
Quienes nunca han tenido una historia y quieren sentir una experiencia romántica así, como quién no quiere una historia romántica a pesar de tampoco tener historias.
Podrás creer que solo existe el amor romántico o que el amor romántico es una mentira, pero en el fondo lo importante es amar. Sea romántico o no, lo importante es que ames, ames sin importar como sea, pero que en verdad ames a aquella pareja que tienes. Podrán durar una vida, unos años, unos meses, lo importante es que ames con todo tu ser. Así las historias tengan finales trágicos, sabrás que amaste; vivir esos buenos momentos, y que siempre habrá más para no estancarte.
No importa si no crees en el amor romántico, no menosprecies a quien aún tenga esa ilusión, y si tú también tienes la ilusión del romance, tampoco obligues a quien no cree a que crea, al final existen miles formas de amar que no descubriremos si no nos arriesgamos a amar
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