Por Olliniltzin López
Esta semana me toca platicarles del último proyecto discográfico de Maggie Rogers, que lleva por título Surrender. Este álbum es el segundo en su discografía, y a diferencia del Heard It in a Past Life, su trabajo anterior, en esta ocasión intenta experimentar con su sonido para traernos una mezcla de tracks que varían entre la balada pop, tan dulce y melosa que podríamos usarla para endulzar el café en las mañanas o para dedicar a esa persona especial, hasta canciones como Overdrive, donde la paleta de sonidos nos lleva de paseo entre sampleos y recursos minimalistas y electrónicos que crean una atmósfera íntima, genial para que la voz de Maggie Rogers complete la ecuación, resultando en un sonido fresco, minimalista y dulce.
Creo que la experimentación constante dentro del disco es de bastante importancia, ya que justo eso hace que este trabajo destaque de toda la gama de buen pop que ha salido últimamente, desde el disco de Gracie Adams, hasta lo nuevo de King Princess (de este les platico en otra entrega). Un poco porque la pandemia está cediendo y otro poco debido al regreso de los conciertos, que ha provocado que muchos lanzamientos que se habían postergado por la falta de promoción estén viendo la luz este año. Esto nos ha llevado a que muchos discos puedan perderse dentro del radar de lanzamientos, y es que, si nos detenemos a pensarlo un momento, el mismo año Arcade Fire, Kendrick Lamar, Rosalia y Bad Bunny sacaron discos.
Regresando al tema de la semana, en Surrender podemos encontrar canciones como Anywhere with You, perfectas para dedicar una tarde de romance, o la peculiar I Got a Friend, que bien podríamos escuchar mientras nos servimos el café en la mañana.
No dejen pasar la oportunidad de escuchar un disco bastante interesante, que seguro tendrá uno o dos temas que terminarán en sus playlist de lo mejor del año.