Frida Cartas
Escribir como un acto de justicia a la historia de las mujeres que fueron calladas
Escribir como una honra a la memoria de las ancestras y las antepasadas
Escribir para tener el antes y el después de nuestras propias historias
Escribir como un arma de defensa contra el mundo misógino y androcéntrico
Escribir como estrategia de resistencia
Escribir como proceso de sanación
Escribir como proceso de crecimiento
Escribir para tejer redes y hacer grande el fuego del caldero
Escribir para crear alianzas más que obras
Pero también escribir obras para dignificar trabajos silenciados
Escribir para que no nos borren nunca más de la historia
Escribir como un espejo donde mirarnos
Escribir para recordarnos
Escribir para guardarnos del mundo y hacer nuestro mundo, ese que quepa en este mundo
Escribir no es un sueño, escribir es nuestra realidad
Escribir para cicatrizar heridas
Escribir para ir sacando el dolor
Escribir para ir apagando la hoguera en que nos quemaron, y todavía aún nos queman
Escribir para irnos armando, pieza a pieza por encajar
Escribir para irnos construyendo
Escribir para irnos formando... materializando inmortalmente en palabras
Escribir sin importar qué pensarán o qué dirán, o cómo nos verán, porque no es competencia, es por y para nosotras, donde otras nosotras podrán ver el fuego desde lejos y unirse alrededor del volcán de las letras y las palabras, cada una juntándose y trayendo sus propias palabras y letras
Escribir sin miedos, porque esos no son nuestros miedos, son los miedos que nos enseñaron para robarnos la escritura
Escribir porque tenemos el derecho de escribir
Escribir por fuera de las escuelas, de donde también nos han echado y hoy nos siguen callando
Escribir porque tenemos mucho qué decir, y qué contar
Escribir porque nos quieren muertas
Escribir para que entiendan que vamos a seguir más que vivas
Escribir en papel o en computadora. Y escribir hasta con notas de voz.
Escribir en los monumentos y en las paredes: escribir, escribir, escribir
Escribir sin títulos nobiliarios y académicos porque podemos y tenemos escritura
Escribir y amar lo que escribes porque esa eres tú, distinta a otra y única entre todas
Escribir como potencia
Escribir como luz
Escribir como fuerza
Escribir para acompañarse y acompañar a otras
Escribir para significarse
Escribir para reinventarse
Escribir para sacar el dolor
Escribir para gritar la alegría
Escribir para a través de recuerdos, recordar
Y escribir también desde el coraje,
o con el corazón abierto
Escribir sin reglas porque las reglas aprisionan, y ya hemos estado un chingo de tiempo encerradas aquí y allá
Escribir por libertad, y con libertad
Escribir todo lo que nos atraviesa el cuerpo
Escribir todo lo que nos pasa por el estómago
Escribir soltando todas las emociones y sensaciones
Escribir porque estamos hartas, contentas, tristes, eufóricas, perdidas, o escribir sólo porque queremos estar con nuestras palabras
Escribir solas o hasta en una reunión, como bordar punto de cruz
Escribir bonito, escribir feo, bien o mal, poco o mucho, escribir sólo porque como dicen en Demac, somos “talladoras de palabras”
Escribir sin ser escritoras, somos escribidoras o escribientas, innatas y poderosas
Escribir soltando todos los olores y sabores, todos los colores y todas las miradas
Escribir como autoconocimiento
Pero sobretodo escribir para mutar porque escribir es transformarnos desde adentro, y transformar ese afuera
Escribir, mujeres
Escribir, escribir, ¡escribir ya!