Por @jefekoala1245
Todos tenemos historias de amor fallidas. En algún momento, esa relación que teníamos y pensábamos que duraría para siempre, terminó, aunque uno no quisiera que eso pasara. De un momento a otro, todo desaparece. Siempre es difícil dejar ir a alguien cuando sientes un gran amor aún, sin embargo, al mismo tiempo esa persona te deja ir sin problema alguno.
Uno sigue aferrado a esa persona, a ese sentimiento, a ese pasado en donde aún sentías que te amaban, y a querer hacer todo lo posible por recuperar eso, arriesgando nuestro propio bienestar.
Todos queremos tener a alguien que le interese lo que decimos, tener a alguien que nos entienda bien, que nos comprenda y que siempre tenga palabras para hacernos sentir bien en nuestros momentos más complicados. Es muy difícil encontrar a alguien que te haga sentir todo eso, pero es aún más difícil haberlo tenido y aceptar que lo perdiste.
Aceptar dejar ir todo eso siempre es lo más complicado después de que un amor que lo era todo, simplemente desaparece.